Y cuando todo parecía ir viento en popa, llega un iceberg y
se baja todo lo que irresponsablemente se estuvo formando en nuestras cabezas.
Es inadecuado, estúpido y desubicado pensar que ya podías disfrutar de la
tranquilidad que nadie más imagina, sentirte afortunado fue iluso.
Porque claro, romper un nudo en la espalda y dormir
profundamente no es lo mismo que borrar malos recuerdos y dar felicidad.
Yo no pretendo dejar de sentirme tan cómodo como lo he
venido haciendo hasta hoy, sea la forma que tome, estas cosas se tienen que
cuidar. Algo tan raro de encontrar no se deja escapar tan fácilmente.
Hora de hacer y aguantar lo que sea necesario.
(hoy, como la foto, nada tiene tanto sentido pues...)
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